Si buscas alivio o relajación, un masaje puede ser justo lo que necesitas. Un tipo de masaje especialmente terapéutico que se ha vuelto cada vez más popular es el masaje con piedras calientes, que integra piedras calientes a las técnicas de masaje tradicionales.
¿Qué es un masaje con piedras calientes?
Un masaje con piedras calientes es un tipo de masaje en el que el masajista coloca piedras lisas y calientes sobre la espalda. Estas piedras proporcionan calor a los músculos, lo que puede ayudar a reducir la tensión y el dolor. Las piedras utilizadas en el masaje con piedras calientes suelen ser de basalto, una roca volcánica rica en hierro, lo que les permite absorber el calor.
Colocación de las piedras en el masaje con piedras calientes. La colocación de las piedras durante un masaje con piedras calientes dependerá de los músculos y tejidos que se estén trabajando.
Por ejemplo, si tiene dolor lumbar, el masajista podría colocar las piedras calientes a lo largo de la columna vertebral. Otros puntos habituales para la colocación de piedras calientes son el abdomen, los senos, la cara, los pies, las sienes y las palmas de las manos.
Técnicas de masaje con piedras calientes. Al igual que la colocación de las piedras, las técnicas que utilice el masajista dependerán de sus necesidades específicas. Los especialistas suelen utilizar movimientos circulares, amasamiento, movimientos largos y vibraciones. Las piedras calientes se pueden usar solas o combinadas con otros tipos de masaje, como el masaje sueco.
Temperatura del masaje con piedras calientes. Las piedras demasiado calientes pueden causar quemaduras, mientras que las que no están lo suficientemente calientes pueden no tener el efecto deseado.a través de enlace https://relajante-masaje-valencia.com/masaje-con-piedras-calientes/ sitio web La Asociación Americana de Terapia de Masaje recomienda que la única forma de calentar las piedras es en agua. El agua debe estar entre 43 °C y 54 °C. F, y el agua debe cubrir completamente las piedras.
Una de las mejores maneras de hacerlo es con un calentador de piedras profesional para masajes. Este aparato se parece a una estufa de cocción lenta y permite regular la temperatura del agua. No obstante, también se recomienda usar un termómetro calibrado para comprobar la temperatura del agua.
Debes poder sujetar las piedras con facilidad. Si no puedes, están demasiado calientes. Nunca las calientes con un agarrador o una sartén. Estos utensilios solo calientan la superficie y no calientan el interior de la piedra como lo hace el agua.
Historia del masaje con piedras calientes
La práctica de usar piedras calientes con fines terapéuticos existe desde hace siglos. Se cree que se originó hace miles de años en el Ayurveda, el antiguo sistema médico indio que adopta un enfoque natural y completamente orgánico para la salud y el bienestar.
Las piedras de río se calentaban para la recuperación y la terapia de masaje.
Las piedras calientes eran populares en toda Asia antigua. Hace unos 4000 años, los japoneses las utilizaban para calentar la zona abdominal y estimular la digestión, mientras que unos 2000 años antes, la medicina china las empleaba para mejorar la función de los órganos internos.
En Norteamérica, los indígenas americanos utilizaban piedras calientes en temazcales, para tratar dolencias y aliviar dolores. Los hawaianos las han utilizado para mejorar la circulación.
Las piedras calientes se incorporaron a las técnicas de masaje modernas en 1993 mediante un método llamado Tratamiento LaStone. Desde entonces, los masajes con piedras calientes han ganado gran popularidad.
Beneficios del masaje con piedras calientes
El uso de piedras calientes en los masajes aporta calor, lo que ofrece numerosos beneficios.
Alivia el dolor y la tensión muscular. Los masajes con piedras calientes pueden aliviar el dolor y la tensión muscular gracias a la combinación de la técnica del masaje y el calor. El calor se suele recomendar para tratar los músculos doloridos. Aplicar calor en una zona del cuerpo ayuda a aumentar el flujo sanguíneo, lo que mejora la recuperación. Aplicar calor en los nudos musculares antes de masajear la zona facilita su relajación.
Reduce la inflamación. La inflamación se produce cuando el cuerpo activa el sistema inmunitario para tareas como combatir bacterias o reparar tejidos dañados. A menudo, el cuerpo envía estas células innecesariamente, lo que puede provocar inflamación crónica y problemas autoinmunitarios. Tanto el calor como la terapia de masaje pueden ayudar a controlar la inflamación.
Mejora la flexibilidad. Las articulaciones y los músculos rígidos limitan la flexibilidad y dificultan el movimiento. El calor y la terapia de masaje ayudan a aflojar y relajar estos tejidos musculares, lo que puede disminuir el dolor y facilitar el movimiento.
Estimula la circulación. Tanto el calor como la terapia de masaje estimulan la circulación sanguínea y mejoran el flujo. Esto reduce las molestias y la hinchazón, y favorece la recuperación.
Reduce la tensión y la ansiedad. Tanto el calor como la terapia de masaje ayudan a relajarse, pero el masaje va un paso más allá. La presión, como la de un masaje o un buen abrazo, libera endorfinas, que relajan los músculos, ayudan a controlar el dolor y mejoran el estado de ánimo.
Fortalece el sistema inmunitario. La tensión puede reducir la capacidad del cuerpo para combatir las enfermedades.
El alivio de la ansiedad que proporciona el masaje con piedras calientes puede reducirla, permitiendo que tu cuerpo recupere su sistema inmunológico.
Mejora el descanso. Ya sea por el alivio del estrés y la ansiedad, la reducción de molestias o la liberación de endorfinas, diversos estudios han demostrado que el masaje con piedras calientes puede mejorar la calidad del descanso.
¿Quiénes pueden beneficiarse de la terapia de masaje con piedras calientes?
Los médicos creen que el masaje con piedras calientes puede ayudar a tratar diversos problemas, entre ellos:
- Estrés y ansiedad
- Enfermedades autoinmunes (pueden requerirse factores especiales a considerar según la enfermedad)
- Frustraciones persistentes
- Depresión
- Problemas digestivos
- Lesiones relacionadas con el ejercicio
- Cansancio
- Fibromialgia
- Insomnio
- Linfedema
- Dolor lumbar y de cuello
- Espasmos musculares
- Varios Esclerosis
Osteoartritis
Dolor postoperatorio (no se deben realizar masajes terapéuticos durante las 6 semanas posteriores a la cirugía, a menos que lo autorice un profesional médico)
Lesiones por estrés repetido
Ciática
Lesiones deportivas
¿Quiénes no deberían recibir masajes con piedras calientes?
Algunas personas deben evitar los masajes con piedras calientes o pueden requerir consideraciones adicionales al momento de recibir un masaje. Los problemas pueden incluir:
- Cáncer
- Problemas de engrosamiento
- Diabetes mellitus
- Epilepsia
- Problemas cardíacos
- Neuropatía
- Osteoporosis
- Embarazo
- Cirugías recientes
- Enfermedades de la piel
¿Qué ponerse para un masaje con piedras calientes?
¿Necesitas usar algo especial para un masaje? ¿Cómo te preparas? Afortunadamente, no es difícil vestirse para un masaje de cualquier tipo. Lo más importante es que uses ropa cómoda y que te permita relajarte. Si prefieres permanecer completamente vestida durante el masaje, usa la menor cantidad de capas posible para que el masajista pueda trabajar los tejidos profundos.
Si piensas quedarte en ropa interior, elige algo cómodo que no sea demasiado voluminoso ni recargado. Para los masajes de espalda, si normalmente usas sostén, un sostén deportivo puede ser más fácil de manejar para el masajista que un sostén convencional con cierre de corchete.
Si usas joyas o accesorios en la zona que te van a masajear, quítatelos cuando sea posible.
